Por Juan Manuel García García
¿Ahora sí?…
Sí.
¿Ya ganamos el quinto partido?…
Sí. A Honduras 5-4 en serie de penales.
¿Ya podemos festejar?…
Sí.
Un momento. Para evitar cualquier tipo de confusiones, déjenme explicar lo del quinto partido: En una Copa del Mundo cada Selección participante deberá ganar sus primeros cinco partidos para acceder a la ronda de semifinales (de ahí la obsesión generalizada entre directivos federativos, cuerpo técnico y jugadores mexicanos por ganar ese quinto encuentro, ya que, supuestamente, eso permitiría a nuestro futbol trascender y ser reconocido en el ámbito mundial), no así en una eliminatoria olímpica como la recién terminada.
Aclarado lo anterior, la Selección Mexicana dirigida por Jaime Lozano se impuso en los cinco partidos que debía jugar en el torneo clasificatorio para los Juegos Olímpicos Tokyo 2020 -que por efectos de la pandemia del Covid-19 se tuvieron que posponer para este año-, certamen que ya contaba con los otros 14 equipos involucrados y solo faltaban los dos representantes de la Confederación Centroamericana y del Caribe de Futbol (ConCaCaF), los cuales se conocieron desde el pasado domingo, cuando México, primer lugar del Grupo A, venció a Canadá, segundo lugar del Grupo B, mientras que Honduras, primer lugar del Grupo B, se impuso a los Estados Unidos de Norteamérica, segundo lugar del Grupo A.
Entonces, de acuerdo con lo anterior, el valor del partido de ayer fue únicamente para definir al equipo Campeón del torneo -es decir, para fortalecer el ego del equipo vencedor, ya que este título representa el ser reconocido como el mejor de la zona-, pues como lo señalé líneas arriba, los dos equipos finalistas ya estaban clasificados, pero además, un quinto partido representa ingre$o$ extras a las arcas de la ConCaCaF, pero bueno, esa es otra historia.
Recapitulando, la Selección Mexicana Sub-23 disputó este torneo como anfitrión, con la ventaja que representa jugar de local, ya que eso le permite recibir una mayor apoyo en la tribuna a pesar de la pandemia, puesto que las autoridades locales permitieron la asistencia de aficionados, no a toda la capacidad del inmueble, pero sí en un porcentaje que, por mínimo que sea, representa una ventaja extra al equipo local.
En cuanto a los resultados del equipo mexicano, de acuerdo al calendario de juego, en su presentación –juego 1- se impuso 4-1 a República Dominicana; en el juego 2 logró la victoria ante Costa Rica por 3-0, enseguida fue la escuadra de Estados Unidos la víctima al caer por 1-0 en el juego 3, mientras que su cuarto partido lo ganó a Canadá 2-0 y en el quinto empató a 1 gol con Honduras -en los 90 minutos de tiempo regular y 30 minutos extras-, lo que obligó a la angustiosa tanda de penales, en la cual, los tiradores catrachos fallaron un disparo (el primero), mientras que los Aztecas anotaron los cinco y con ello obtuvieron el ansiado título.
¿Qué viene ahora para Jaime Lozano y su equipo?
Primero, esperar al 21 de abril, fecha en la que el Comité Organizador de los Juegos Olímpicos en Japón celebrarán el sorteo para conocer el calendario de juego y sus rivales y entonces, junto con su cuerpo técnico, el “Jimmy” Lozano definirá el plantel de 18 jugadores, así como escoger a los 3 mayores de 23 años que fungirán como refuerzos para la competencia, además de preparar algunos juegos amistosos que le permitirán al equipo entrar en ritmo de competencia y así, tentativamente, llegar con un nivel de juego que le permita aspirar a emular a la Selección Mexicana del 2012, que logró la medalla de oro en Londres, bajo la dirección técnica de Luis Fernando Tena…
¿Estamos?
El Pilón
¿Y cómo le fue a la Selección Mayor en su partido ante Costa Rica, en su gira por tierras europeas?
Bien a secas, pues en un partido de alternancias tanto en la posesión del balón como en el posicionamiento sobre el terreno de juego, finalmente, los pupilos de Gerardo “Tata” Martino lograron una apretada, aunque merecida victoria (1-0) ante un representativo tico que salió a dar la cara, sin complejos y jugando al tú por tú, sin pedir ni dar cuartel, de ahí que fuera hasta las postrimerías del segundo tiempo cuando en pleno acecho sobre la portería de Keylor Navas, el “Chuky” Lozano, de certero cabezazo dio forma al marcador para emparejar los resultados obtenidos en esa mini gira, pues hay que recordar que en su primer partido, los Aztecas cayeron por 1-0 ante el representativo de Gales.
Por cierto, en ambos cotejos fue evidente la ausencia de Raúl Jiménez en el eje del ataque tricolor, situación que se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza para Martino, quien, por cierto, en una muestra de su desesperación, en días pasados mencionó que salvo Carlos Vela, jugadores que mantengan actividad y pasen un buen momento en sus equipos, tendrían oportunidad de integrarse al Tri, por lo que Javier “Chicharito” Hernández podría, en un momento dado -si es de su interés y se pone las pilas-, retornar a las filas de la selección nacional.
¿Vale?…