México cerró su gira por Holanda con empate a 2 ante un ordenado equipo de Argelia
Por Juan Manuel García García
¿Difícil?
Sí…
¿Más complicado que Holanda?
Sí…
¿Justo el resultado?
Sí, también…
¿México quedó a deber en su gira por Holanda?
De ninguna manera…
¿Algo que resaltar de este cotejo?
Sí: Los goles de México conseguidos con asistencia de Raúl Alonso Jiménez.
Entrando en materia, con un empate a dos goles ante el seleccionado de Argelia, el representativo mexicano enfrentó el segundo compromiso de esta mini gira europea -con una cosecha de 4 puntos, de seis posibles-, y aunque por momentos parecía mantener el control del partido, la verdad es que al final tuvo que prodigarse para conseguir el empate ante un equipo argelino bien plantado en el terreno de juego, que de principio a fin mantuvo una doble línea de contención que cerraba los espacios a los jugadores aztecas.
Tuvo que ser con genialidades que el conjunto tricolor logró hacerse presente en el marcador, y aunque ambos goles fueron de una manufactura que rayaba en lo sublime, hay que reconocer que Raúl Jiménez, el ariete que pasa por un extraordinario momento en la Liga Premier con el Wolverhampton, tuvo qué ver en ambas anotaciones pues fue él quien tras una pared con Jesús Manuel “Tecatito” Corona habilitó al jugador del Porto para que entrara sólo al área y éste, con un fino toque “picó” el balón a la salida del portero argelino para poner, al minuto 43 el 1-0, ante el júbilo de Gerardo “Tata” Martino y el resto de jugadores y cuerpo técnico nacional.
Sin embargo, apenas un minuto después vino el “quitarisas” y Argelia logró el empate a un gol, echando abajo la intención de los mexicanos por irse al vestidor con ventaja.
Para el segundo tiempo, un descuido de la zaga tricolor al minuto 66 permitió el 1-2 y a partir de entonces, Argelia dominó el partido, pero a los 88, México anotó su segundo gol gracias a una asistencia de Raúl Alonso, quien tocó de manera precisa el balón justo cuando Diego Lainez –quien entró al partido en sustitución de Rodolfo Pizarro– entraba al área y…
En una jugada también vistosa, llena de virtuosismo, el jugador del Betis, con una media tijera hizo inútil la salida del voluntarioso arquero del conjunto Campeón de África, quien con un rictus de dolor, se pusiera de pie para sacar el balón de las redes y de inmediato intercambiar con sus compañeros en la zaga miradas de reclamo por las facilidades otorgadas a los atacantes mexicanos, quienes exhibieron sus recursos técnicos para hacerse presentes en el marcador y poner cifras definitivas al encuentro.
Veremos si hoy los diarios y programas deportivos de las grandes televisoras destacan la culminación de lujo de los goles conseguidos por “Tecatito” Corona y Diego Lainez, mismos que firmarían los mejores atacantes –sin necesidad de mencionar nombres-, del mundo…
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