La 13, solo una ilusión para las Chivas

La 13, solo una ilusión para las Chivas

Por Juan Manuel García García

Un acelerado Paunovic falló la estrategia en el partido más importante…

Ganaba 2-0 y El equipo perdió el orden con los prematuros cambios…

La salida de Alexis Vega, el mejor jugador rojiblanco, pudo retrasarse…

Tan cerca y tan lejos.

Así estaba la consecución de la Copa de Campeón para las Chivas que culminó la primera mitad del encuentro de la final del torneo Clausura 2023 de la Liga mx ganando 2-0 (Alvarado 11’ y Guzmán 20’) a una escuadra de los Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León que se salvaron de más anotaciones gracias a la falta de puntería de los jugadores rojiblancos.

La ilusión de alzar la Copa crecía conforme se dieron las anotaciones, pues apenas iban 20 minutos de juego y ya el marcador hablaba de un dominio estratégico por parte del cuadro local, de ahí que conforme avanzaba el tiempo la confianza en anotar el tercer gol estaba en el ánimo del respetable, pese a que ya las huestes neolonesas comenzaban a generar espacios a la ofensiva.

Comenzó la segunda mitad de juego y las primeras llegadas al arco de Nahuel Guzmán mantenían la fe en la conquista del título, pero de repente, una mala decisión en la banca del Guadalajara, derivó en una sucesión de circunstancias que, poco a poco, fueron minando la confianza de los seguidores rojiblancos. Se percibía la tensión que llegaba desde el terreno de juego hasta la tribuna.

Corría el minuto 60 de juego cuando desde la banca del chiverío vino la primera de esa serie de circunstancias mencionadas líneas arriba cuando Paunovic decidió sacar, en un mismo movimiento, tanto a Ronaldo Cisneros como a Alexis Vega. En el caso de Cisneros, se puede entender porque se desgastó corriendo detrás del balón todo el partido, buscando presionar ya fuera a Nahuel o a las defensas regias, pero si bien Alexis también había sufrido una merma física, estratégicamente era el jugador que, de alguna manera, representaba el orden del equipo en la cancha.

Y es precisamente en este momento donde considero que se aceleró Paunovic, pues una opción ofensiva era dejar a Vega en la cancha y al “Pocho” Guzmán en el eje de ataque para seguir generando, por lo menos durante otros 10 minutos, acciones a la ofensiva, mientras que el recién ingresado Pável Pérez reforzaba la línea media.

Obviamente no pretendo, con mi punto de vista, interferir en el trabajo del técnico serbio, pues lo he visto reaccionar tácticamente diferente en situaciones similares, sin embargo sin un jugador con la capacidad técnica de Alexis ya no puede hacer derroche de velocidad en los desplazamientos, por lo menos sí tiene la capacidad para dirigir a sus compañeros sobre el terreno de juego y, además, proveer de balones a Guzmán y así, mantener ocupada a la defensiva contraria.

Sin embargo, a la salida de Vega se confirmaron los temores de los seguidores de las Chivas, pues a partir de ese momento los jugadores de los Tigres contaban ya con 30 minutos de juego para presionar al equipo de casa y a partir de ese momento prácticamente le apedrearon el rancho al portero rojiblanco, lo que dio pié a la segunda circunstancia en contra como consecuencia de la desatinada decisión de Paunovic.

Ese dominio de los Tigres comenzó a dar frutos 5 minutos después de los cambios, pues un remate de Sebastián Córdova pegó en la mano de Antonio “Pollo” Briseño y aunque el árbitro Ramos Palazuelos dudó por un segundo, al final marcó el penal y amonestó al zaguero rojiblanco.

El 2-1 cayó con el acertado cobro de la pena máxima por parte de Gignac, quien con un fuerte disparo a la derecha de Jiménez, acortó la distancia en el marcador y fue la tercera circunstancia que comenzó a alejar al rebaño Sagrado de la 13, la ilusión se iba desvaneciendo.

Al reanudarse las acciones, si bien hubo por ahí algunos intentos de los jugadores locales por aumentar el marcador, ya no se les apreciaba la misma confianza cuando tenían el balón en sus pies y poco a poco, los pupilos de Robert Dante Siboldi se posesionaron del balón, mantuvieron un mejor posicionamiento en la cancha y, por ende, se adueñaron del partido, de tal suerte, que al minuto 72 cayó el gol que, por lo menos, aseguraba los tiempos extras, pero en honor a la verdad, era el pundonor lo que mantenía de pie a los jugadores de las Chivas, que todavía tuvieron arrestos para evitar otro gol en los minutos restantes y la primera mitad de los tiempos extras.

Cabe señalar que si bien Guido Pizarro acabó con la ilusión de los seguidores del Rebaño Sagrado, antes de la anotación que sentenció el resultado, las Chivas fallaron el gol que les daría la ventaja, pero este deporte se gana con goles y por esta vez, después de haber tenido tan cerca la posibilidad, al final los Tigres alzaron la octava y la 13 sigue pendiente para el equipo más popular del futbol mexicano.

Una vez señalado lo anterior, de parte de quien esto escribe vaya mis felicitaciones para la afición primeramente, el cuerpo técnico y plantel de jugadores, así como para la directiva del Patronato de los Tigres de la UANL por su merecido triunfo.

En conclusión, estoy seguro que quienes acudimos al estadio Akron el pasado domingo disfrutamos de un buen partido de futbol donde cada equipo brilló en su momento y aunque al final no se impuso el equipo de casa, hay que dejar en claro que quien se equivoca pierde, de ahí que hay que reconocer que aprovechar los errores del rival también es parte del futbol, por lo que ni a Siboldi y sus jugadores no se les puede criticar por ello.

Por otra parte, si bien para Vejlko Paunovic esta fue una dura lección en su carrera, de seguro esta experiencia le servirá para aprender y sacar provecho de ella, de ahí que -al menos eso se espera-, la directiva, plantel de jugadores y cuerpo técnico buscarán que en un futuro cercano, sirva para ofrecerle a su afición, la escurridiza 13…

¿Estamos?